lunes, 11 de marzo de 2013

Sin sentido

Hoy mientras caminaba hacia el local que me tocaba medir pensaba, luego de ver en una vidriera un buzo con los colores de la bandera inglesa, en lo chotos que somos los argentinos.

Hace poco se armó un tole tole en facebook porque decían que si usabas los colores de Inglaterra eras un traidor a la patria, porque las Malvinas esto y aquello. ¿Y todo lo demás? Esas personas que juzgan a uno de vende patria por la estupidez de usar los colores de otro país (cuando estoy segura que nadie piensa en la guerra de Malvinas cuando se viste así), ¿no consume nada de otros países? ¿Qué me dicen de productos españoles, cuando fueron de España los colonizadores de América? ¿Tampoco consumen ningún producto yanqui? Estados Unidos no es muy amigo nuestro tampoco. ¿Y la costumbre de comer paella en semana santa? ¿Es argentina? No señores, no es de acá.

Es muy simple agarrarse de algo "que vende" y quejarse, y quedar como un capo patriota que ama su tierra cuando la mayoría de las costumbres que tenemos son rejuntes de otras culturas. Como quejarse del consumismo estadounidense y, en rebelión, no ir a comer a Mc Donald's pero sin embargo usar un iphone. ¡Apple no es de Argentina, eh!

Recuerdo que yo salía con un chico que acusaba a la banda Ska-P de venderse porque estaban en contra del consumismo, y cuando vinieron a Buenos Aires una vuelta tocaron en uno de esos "Pepsi music", y él, fan de la banda, se negó a ir porque decía "que todo el asunto era muy hipócrita". Ese pibe, sin ir más lejos, usa muchísimo internet. ¿Dónde se creó internet? ¿En Buenos Aires? No, no. En las tierras del Tío Sam.

Somos bastante ilógicos a veces y me saca de quicio la manía de tratar mal a otro y bardearlo sólo porque sí. Creyendo que somos vivas imágenes de nuestras raíces. Por empezar, ni siquiera nuestras raíces son nacionales. Quisiera saber cuántos de nosotros, o de esos que se jactan de que no usan la bandera inglesa en la ropa, tienen sangre 100% nativa. O si hacen bien todo, al pie de la letra, sin usar ni hacer nada que venga de un país que en algún momento nos hizo daño. No defiendo para nada lo que pasó en esa guerra, pero no fue lo único que nos lastimó.

Dejémonos de joder un poco.

4 comentarios:

Mr. Popo dijo...

Mi patria es el mundo, dijo uno que no me acuerdo.

Ana O dijo...

Justamente estaba pensando algo parecido, en los que se llenan la boca de nacionalismo barato mientras chequean Twitter en su iPhone. Querer a la patria es trabajar para hacerla grande, no bardear a los demas ni hacer patrioterismo.

La Garrapata Vegetariana dijo...

Yo propongo algo diferente. Hacer un ejercicio mental: supongamos que los kelpers abandonan las islas, la tierra con sus viviendas quedan ahí solitas sin que nadie las reclame.
¿Cuantos de los que gritan patria o muerte se irían a vivir a las islas?
¿Es una protesta infantil (Quiero lo que tiene el otro) o realmente nos importa la soberanía?

Zeithgeist dijo...

Faaaaah, me hiciste acordar a un suceso muy lamentable que tuve q vivir en cordoba.
Yo me había comprado una remera que me encantó con la bandera inglesa al frente bien grande. ndaba por ahi chocha con mi remera y de pronto sin darme cuenta paso al frente de un puestito de los ex combatientes de malvinas.. PARA QUE!!! Salió un viejod e ahi, me empezó a gritar de todo, intentó tironearme la remera y me persiguió como dos cuadras con al mano en alto a punto de pegarme. QUE MIERDA! Yo entiendo q debe ser feo ser ex combatiente, pero viejo, porqué no se dedica a odiar a los milicos q lo mandaron ahí al pedo a morirse (basicamente) en vez de joder con un nacionalismo idiota??