viernes, 22 de marzo de 2013

Ese vecino amigo

En la ciudad de Buenos Aires, además de los muchos problemas que he podido nombrar, hay uno en particular que está complicado de erradicar: el asunto de la caquita de perro.

Si bien se ve que cada vez hay más gente que sale con la bolsita atada a la correa o el artilugio este porta bolsitas que queda muy "top", todavía hay personas que deben creer que el sorete de su mascota va a desaparecer por arte de magia una vez que se han ido, porque ni se mosquean cuando su perro deja el regalo en la vereda/lugar de preferencia.


Artilugio TAAAAAP porta bolsita caquera

El problema es que esos soretes, buen señor que no quiere agacharse a juntarlos, no se evaporan con el calor ni desaparecen mágicamente por la noche como algunas perillas de puertas (ah sí, ¡en épocas se chorean hasta las perillas de bronce de las entradas de las casas!), sino que se quedan ahí, esperando que algún boludo los pise, los patee o se los lleve pegados en la rueda de la bicicleta/cochecito del bebé. Cual muestrario de la desgracia, nuestras veredas están minadas de mierda, y en algunas ya se complica caminar, en parte por la cantidad y en parte por el olor. Un *grato* ejemplo de esto es la vereda del jardín botánico, apesta a caca de gato y uno que pensaría que caminar por ahí y ver el verde sería lindo, bueno, ¡NO! ¡APESTA!

Cuestión que además de hacer campañas virtualmente, a veces encontramos cartelitos pegados por la ciudad pidiendo encarecidamente a la gente que se haga cargo de los obsequios de sus amadas mascotas. Algunos suenan medio militares, tipo "JUNTE LA CACA DE SU PERRO, NO SEA SUCIO" y algunos tienen un tono más amable, hasta gracioso, intentando que uno se ría y finalmente acceda a juntar el montoncito en cuestión, como este que se ve por el barrio donde vivo:


Las caritas me vuelven loca

Señor, señora, joven paseador de perros: deje de minar las veredas de nuestra ciudad, y deje de llenar de caca el pastito de nuestras plazas; nos gustaría poder sentarnos a disfrutar un mate sin tener miedo a llenarnos la mano de mierda en el intento.

2 comentarios:

Stretching the limits of my imagination dijo...

jaja, aca te cobran multas hasta 500 Libras Esterlinas si no juntas la caca del rrope. Por eso al mio lo tengo bien educadito, bah...el caga en cualquier lado, el que se tuvo que educar, fui yo.

Anónimo dijo...

Pues si, es bien molesto y más cuando se meten a tu casa y al día siguiente que sales a la calle ves tu regalote en la mera entrada ¬¬

Saludos!!